San Fernando a creado y desarrollado uno de los mejores programas de lucha masculina y femenina en la Ciudad, con 21 campeonatos ganados desde 1977.
Así que cuando otro equipo logra llevarse el título, hace noticias.
Eso fue lo que pasó el pasado sábado 17 de Febrero en el Roybal Learning Center de Los Angeles.
San Fernando, con 2,76.50 puntos ganó su segundo título femenino consecutivo y cuarto en los últimos cinco años. (La lucha femenina ha sido parte de los deportes escolares desde 2013). Los Patriots de la secundaria Birmingham Charter, con 234.50 puntos, quedaron segundas ante las Tigers.
Sin embargo, del lado masculino, Birmingham se llevó el trofeo al superar a San Fernando por 278.50 a 256.50 puntos. Esa victoria puso fin a años de frustración para los Patriots, que ganaron el campeonato por última vez en 2013. Habían terminado en tercer lugar en 2014 y 2015, luego en segundo lugar en 2016 y el año pasado.
Ambos entrenadores dieron crédito de sus títulos al esfuerzo de sus equipos.
“También son muy trabajadoras, para usar una frase”, dijo el entrenador Fernando González, al describir el equipo femenino de San Fernando. “Para ellas, [la lucha libre] es un trabajo. Y lo toman muy en serio cuando se trata de estar listas y mentalmente fuertes”.
Los chicos de Birmingham eran “un grupo de élite de chicos que se comprometieron con mi idea del proceso y el programa”, dijo el entrenador James Medeiros. “La mayoría de ellos son jóvenes, así que muchos volverán el año entrante. Quieren lo que les he estado vendiendo. A eso se reduce esto”.
San Fernando y Birmingham fueron los principales contendientes antes de la ronda final de encuentros el sábado.
En las luchas femeninas, las Tigers tenían una ventaja de 242.50 sobre 216.50 de las Patriots. Pero San Fernando nunca dejó que Birmingham se acercara, ganando seis de los siete encuentros de campeonato en los que las Tigers estaban participando. Sus ganadores fueron París Valencia (101 libras); Jessica Vázquez (106 libras); Karla Rivera (121 libras); Samantha Larios (131 libras); Gianna Anaya (143 libras); Sandra Castrejón (160 libras); y Adelina Parra (170 libras).
La victoria más dramática llegó en la pelea de 131 libras. Larios estaba a unos momentos de una derrota, pero luego sacó un impresionante revés de último segundo contra su oponente, Ayana Cabrera, de Birmingham para sacar una victoria de 9-8.
Las chicas de los Patriots ganaron tres de sus siete encuentros de título. El más histórico fue en el de 189 libras, cuando Alexandra Castillo ganó un cuarto campeonato de al retener a Angela Buenrrostro de Monroe. Castillo es la primera luchadora femenina de la ciudad en lograr esta hazaña.
Rivera (121 libras) y Tiffany Calderon (150 libras) también se convirtieron en campeonas por el lado de Birmingham.
Otras jovencitas ganadoras fueron Allyah Rollins (111 libras), Salma Morales (116 libras), Alexandra Banag (137 libras) y LeAnn Chapman (235 libras) Granada Hills Charter; y Yuridia García de Monroe (126 libras).
Monroe, con 143 puntos en total por equipo, fue tercero, seguido por Granada Hills con 129 puntos y Poly con 91.
Birmingham comenzó los encuentros finales masculinos en el primer lugar con 259 puntos. San Fernando fue segundo con 233.50. Los Patriots tenían nueve luchadores en la final mientras que los Tigers tenían siete. Había también batallas encarnizadas entre los equipos, en las 128, 140 y 222-libras.
San Fernando ganó los tres. Albert del Toro ganó el título de 128 libras por una decisión de 7-5 contra Diego Nava de Birmingham. Eric Rocha se anotó una victoria por decisión de 9-1 contra los Patriots, Desi Lobos en la lucha de 140 libras. Y Joey Reyes fue el vencedor en las 222 libras sobre Gabriel Mejía.
Pero los Tigers probablemente necesitaban ganar las siete luchas para tener una oportunidad del campeonato. Sólo coronaron a dos campeones más — Cristian Loera (108 libras) y Kobe Pepe (122 libras).
No fue suficiente para superar a Birmingham, a pesar de que los Patriots sólo fueron ganadores en cuatro clases de peso: Roque Roman (115 libras), Jonavon Smith (172 libras), Carlos Gómez (184 libras) y José Chacón – y también les quitaron un punto por equipo por las celebraciones excesivas después del encuentro final.
La diferencia de puntos el sábado probablemente se basó en que Birmingham tuvo cinco segundos lugares y un tercer lugar en la final. San Fernando tenía sólo dos finalistas de segundo lugar y ningún ganador del tercer lugar.
Medeiros estaba extasiado de haber superado por fin a los Tigres en los campeonatos masculinos.
“Siempre han sido buenos desde el principio [en la lucha]”, dijo el entrenador gentilmente sobre San Fernando. “Hemos sido buenos en los últimos 6-7 años, principalmente porque he tratado de hacer que los chicos hagan un montón de cosas extras. Hemos tenido que reponer en cuatro años lo que han hecho por 10. Tienen un gran club de chicos [en la lucha libre], donde hemos tenido chicos que vienen de la escuela secundaria.
Gonzalez también felicitó gentilmente a Birmingham por su victoria, mientras que aplaudía el desempeño de sus atletas.
“Felicitaciones para ellos. Se lo merecían”, dijo de Birmingham. “Estoy tan orgulloso de ambos equipos; lucharon bien. Birminham nos superaba con mucha experiencia. Pero pienso que nuestros chicos pudieron haber salido avantes, pero no sucedió”.
Otros campeones masculinos fueron Aaron Galef (134 libras), Jake Carpenter (154 libras), Chance Chapman (162 libras) y Hamzah Al-Saudi de Palisades Charter of Pacific; Jordan Cabral de Sylmar (147 libras);
Palisades se adjudicó el tercer lugar en la competencia por equipos con 179 puntos, seguidos de Sylmar con 164 y Eagle Rock con 91.