No es fácil o sencillo ser un programa “bueno” en el football de la City Section en estos días con el cambio perpetuo de ida y vuelta a través de sus diversas divisiones como un método para promover la equidad competitiva.
Una temporada “buena” puede elevar a un equipo a una división superior para la cual podría no estar preparado para enfrentar en la temporada siguiente. Ese es el escenario actual al que se enfrenta Arleta, que actualmente se encuentra en la División II. Pero haber ganado ocho partidos y llegar a la ronda de cuartos de final de los playoffs de la División II en 2018 podría ser suficiente para que los Mustangs pasaran a la División I. Y el equipo no conocerá su destino hasta después de la reunión de los entrenadores la próxima semana. Y no son el único programa que no está seguro de dónde estará en el 2019: las secundarias Grant y Franklin de Los Angeles también podrían ser equipos de la División I.
Dondequiera que Arleta termine, los Mustangs se harán escuchar. Porque están ansiosos por volver a jugar al football, aunque sólo para que se deshagan de los malos recuerdos de cómo terminó la temporada 2018 en Noviembre pasado.
Estaban en desventaja contra la secundaria Locke de Los Angeles en el partido de playoffs de cuartos de final, 28-21, pero alcanzaron la línea de 2 yardas de los Saints con la oportunidad de empatar. El balón fue dado a James Ochoa, que ya había corrido más de 200 yardas y tenía dos touchdowns. Pero se detuvo antes de la zona final en la última jugada del juego.
“Eso va a permanecer conmigo durante mucho tiempo”, dijo Ochoa, estudiante de ultimo año que cumplió 17 años el miércoles 17 de Julio. “Fue la última jugada del juego. Me atormenta hasta el día de hoy”.
Ochoa no tiene nada por lo que disculparse. Tuvo una increíble temporada en 2018, con 1,962 yardas y 25 touchdowns por la vía terrestre, y tuvo otros cuatro touchdowns como receptor. Representó casi la mitad de los 5,082 yardas totales del equipo.
“Ese [desempeño] fue una sorpresa y estábamos muy contentos por ello”, dijo el entrenador de los Mustangs, Bill Coan. “Hace algo único cuando es golpeado: rueda y rebota. Sí recibe golpes, pero se cuida solo. Es extremadamente inteligente. También tiene una gran visión: ve cosas y se recorta cuando corre. Eso es un poco difícil de enseñar”.
Pero el partido final contra Locke no fue la única derrota que sigue irritando a los jugadores que regresan este año. La única derrota en la Liga East Valley fue ante el eventual campeón Grant, una derrota 49-0 en la que, como dijo Coan, “todo lo que hicimos estuvo mal”.
El lineman de 17 años declaró que el equipo no estaba preparado mentalmente.
“Llegamos con la mentalidad de que [sólo teníamos que venir para ganar]”, dijo Nogales. “Lo que pasó, sucedió. Pero esa derrota también nos unió. La próxima vez que salimos al campo sabíamos lo que teníamos que hacer para mejorarlo”.
Dijo que el equipo aprendió a “tomarlo partido por partido. Te preparas y sólo piensas en ese juego esa semana”.
El receptor Herman Torres, Jr., de 17 años, declaró que su último año esta temporada se trata de “preparar a todos. Hemos pasado por muchas cosas juntos, especialmente el juego contra Locke, que nos está preparando para este año”.
Alex Pleitez, que cumple 17 años en Agosto y es uno de los dos quarterbacks que Coan planea utilizar, añadió que el equipo tiene “un vínculo diferente” en la temporada 2019. “Estamos mucho más cerca de lo que estábamos en años anteriores. Puedes sentirlo en el campo. Nos estamos esforzando más este año, corriendo más rápido, terminando el acondicionamiento”.
A pesar de que el acondicionamiento y los entrenamientos tempranos han sido animados, Coan dijo que el mensaje sobre la maduración que él y su personal están tratando de impartir también parece estar afianzando.
“Cualquier cosa que enseñemos, también enseñamos como lecciones de vida”, dijo el entrenador. “El año pasado en nuestro último partido no terminamos. Locke fue unos metros mejor que nosotros y tenía mucho talento. Pero sentimos que podíamos competir con ellos; no conseguimos encontrar su ubicación exacta.
“Para nuestros chicos, comenzamos este lema en Enero: ‘Cuanto más trabajo hagamos en Enero, más lejos llegaremos más adelante en el año’“.
La mentalidad unificada de los Mustangs será crítica para el calendario fuera de liga— que comienza el 23 de Agosto de visita ante la secundaria Los Angeles, e incluye pruebas difíciles como contra la secundaria St. Genevieve— y luego partidos de la liga donde esperan rivales como Grant, Chávez y Monroe.
“Creo que podemos ganar más este año”, dijo Torres. “Tenemos el talento para ello. Y queremos llegar más lejos en los playoffs”.
Eso es lo más cerca que los Mustangs llegarán a declaraciones públicas. La temporada 2019 será más acerca de asegurarse de que el equipo está listo mental y físicamente orientado para el juego de esa semana, no sólo aparecer o mostrarse.
El running back Michael Robertson, de 16 años, lo pone así.
“Sólo tengo que coger la pelota y correr con la pelota. Sólo jugar el juego”.