LOS ANGELES (CNS) – Con los estudiantes del Sur de California preparándose para regresar a la escuela luego de tiroteos masivos recientes, funcionarios del Condado de Los Ángeles resaltaron una expansión importante en un programa destinado a identificar a las personas que potencialmente podrían suponer una amenaza y necesitar intervención con servicios de apoyo.

Las Supervisoras Janice Hahn y Kathryn Barger dijeron que el Condado ha triplicado el tamaño y el alcance del Equipo de Respuesta a la Evaluación de Amenazas Escolares, o START.

“No tengo ninguna duda de que el programa START ya ha salvado vidas, y esta expansión significa que estamos más preparados que nunca para intervenir y proveer ayuda a un estudiante con problemas antes de un incidente violento”, dijo Hahn en una declaración.

El programa START involucra personal del Departamento de Salud trabajando con escuelas y socorristas en un esfuerzo por prevenir que escalen amenazas potenciales en los planteles. El equipo proporciona capacitación al personal escolar, estudiantes y padres y trabaja para identificar y evaluar “amenazas declaradas, implícitas o percibidas”.

Cuando se identifican tales amenazas potenciales, el equipo trabaja con escuelas y las fuerzas del orden para intervenir y prestar servicios, evaluaciones psiquiátricas y la provisión de programas de salud mental.

Desde que el programa comenzó en 2009, ha recibido más de 12,000 referencias, según el Condado.

“Prevenir la violencia en los planteles a través de la identificación temprana y la intervención es realmente clave”, dijo Barger. “Desde que START fue creado hace una década hubo un progreso inmenso para ayudar a proteger a nuestros estudiantes y proporcionarles con los recursos de salud mental que necesitan.”