AP Foto / Martín Mejía

Una mujer explica a los soldados que está buscando alcohol en farmacias, antes de que la dejen continuar su camino, en el tercer día del estado de emergencia en Lima, Perú, el miércoles 18 de marzo de 2020.

LA HABANA (AP) — El Ministerio de Salud cubano reportó el miércoles la primera muerte por el nuevo coronavirus: un italiano de 61 años cuyo caso había sido confirmado tras su ingreso a la isla a comienzos de mes. Falleció en la madrugada y estaba en terapia intensiva. 

A su vez las autoridades isleñas actualizaron el número de infectados, que ascendió a 10.

A las severas restricciones a la movilidad, el gobierno ecuatoriano sumó el miércoles sanciones económicas y penas de prisión para quienes no respeten la orden de quedarse en casa para frenar la propagación del COVID-19.

Se suspendieron los viajes interprovinciales por aire y tierra, mientras decenas de policías y militares verifican en las calles que los ciudadanos se desplacen únicamente por situaciones de emergencia, compra de comida y medicinas o para ayudar a enfermos o ancianos. Quienes infrinjan la cuarentena podrán ser multados con sumas de entre 200 y 6.000 dólares y penas de prisión de uno a tres años.

Hasta ahora hay 155 contagios -119 en Guayaquil-, 235 casos bajo sospecha y dos fallecidos.

Desde la noche del lunes también está en vigencia un toque de queda por las noches que se amplió en Guayaquil dado que registra la mayor cantidad de contagios.

Según el vicepresidente Otto Sonnenholzner, la propagación del virus obedece a que la gente no acató la cuarentena y las autoridades debieron interrumpir y cancelar fiestas como matrimonios.

Ecuador está bajo estado de excepción por 14 días, lo que implica el cierre de los servicios públicos -menos los sanitarios y seguridad-, y las actividades del sector privado, excepto las vinculadas con la alimentación, salud y finanzas.

El miércoles por la tarde, el ministro de la Producción, Iván Ontaneda, dijo en rueda de prensa que la banca internacional entregó a Ecuador 80 millones de dólares para hacer frente al COVID-19. En tanto, el viceministro de Turismo, Ricardo Zambrano, estimó que las pérdidas derivadas de la paralización de actividades por 30 días serían de 150 millones de dólares.

Más temprano, el presidente chileno Sebastián Piñera declaró el estado de catástrofe nacional, que regirá desde la medianoche del jueves y durará 90 días, y que “tiene como objetivo anticiparnos y prepararnos para las etapas que vienen en esta pandemia”.

La medida permite restringir el derecho a la locomoción y reunión en lugares públicos, establecer limitaciones al ejercicio del derecho a la propiedad y ordenar el acopio de alimentos y otros artículos necesarios para la subsistencia de la población.

Centenares de miles de chilenos están bajo una cuarentena voluntaria mientras la de los tres millones de estudiantes es obligatoria y desde el miércoles están cerradas todas las fronteras. Sólo pueden ingresar al país chilenos o extranjeros residentes, quienes están obligados a guardar una cuarentena de 14 días.

En Chile el avance del coronavirus ha sido uno de los más rápidos de la región, aunque de los 238 contagiados sólo ocho están hospitalizados y no se ha registrado ninguna muerte.

Perú también endureció su cuarentena y prohibió salir de las casas durante la noche luego de que los infectados subieran a 145, con 28 nuevos casos en 24 horas.

En conferencia de prensa, el presidente Martín Vizcarra también prohibió desde el jueves la circulación de cualquier automóvil particular. Se anunció que Perú empleará la villa deportiva usada como alojamiento durante los Juegos Panamericanos 2019 para los infectados que no estén graves pero que requieran cuidados.

Vizcarra indicó que un hospital recién construido en el este de Lima será usado exclusivamente para atender a los enfermos graves.

El gobierno ordenó no cortar el servicio de agua potable a los deudores y anunció el reparto de agua gratuita en cisternas a 400.000 pobres que no tienen el servicio y viven en elevadas colinas desérticas de Lima mientras dure la cuarentena.

En Argentina, donde hay 77 infectados y hubo dos fallecidos, las provincias de Santa Fe, Santiago del Estero, Chaco, Jujuy y Mendoza cerraron sus fronteras.

La Administración Nacional de Aviación Civil habilitó a otras compañías aéreas a repatriar a miles que se encuentran varados en el exterior, lo que sólo hacía Aerolíneas Argentinas.

En tanto, la alcaldía de Buenos Aires anunció que los bares y restaurantes podrán estar abiertos con un máximo de personas, determinado por la cantidad que puedan sentarse en las mesas. Los grandes comercios podrán abrir mientras puedan garantizar que no haya más de una persona por cada 16 metros cuadrados, pero los cines serán clausurados y los patios de comidas sólo funcionarán para alimentos para llevar.

En los próximos días las autoridades evaluarán el funcionamiento de la red del metro para lograr que viajen únicamente pasajeros sentados.

En Bolivia, la presidenta interina Jeanine Áñez lanzó un bono equivalente a 72 dólares para cada niño que esté en una escuela pública y será entregado en abril dado que los colegiales no tendrán el desayuno escolar por la cuarentena de 12 horas por unos 15 días.

Las familias y empresas pequeñas estarán exentas de pagar dos meses del capital de su deuda y se prohibió que se corten los servicios básicos.

En el centro de La Paz un grupo de médicos exigió condiciones para atender la enfermedad en los centros de salud.

Bolivia reportó 12 casos, la mayoría por contagios internos. En el país hay emergencia sanitaria y cuarentena de 12 horas, así como suspensión de viajes terrestres y prohibición de ingreso de europeos y asiáticos hasta el 31 de marzo.

A su vez, el presidente guatemalteco Alejandro Giammattei anunció un nuevo contagio, lo que llevó la cifra a siete infectados y un fallecido.

El mandatario pidió al Congreso una ampliación presupuestaria de unos 1.000 millones de dólares para reactivar la economía por la crisis.

El país hizo un “vuelo de rescate” de 87 guatemaltecos que estaban varados en Costa Rica y Colombia debido al cierre de fronteras. La cancillería dijo que se los examinó y se les pidió entrar en cuarentena.

La víspera, Colombia decretó el estado de emergencia económica y social y ordenó que los adultos mayores de 70 años queden en aislamiento obligatorio hasta el 31 de mayo, excepto para abastecerse de productos de primera necesidad.

Andrés Mazuera, dueño de un autobús intermunicipal de Colombia, dijo a The Associated Press que en un día normal tenía una ganancia de unos 300 dólares “pero desde la semana pasada, donde se recomienda a los colombianos no salir de sus casas, nuestra producción bajo casi a 120 dólares diarios, muy preocupante”.

El Ministerio de Salud colombiano ha informado hasta este miércoles 93 casos en diferentes partes del territorio nacional, aunque la mayoría se concentra en Bogotá.

México planea adelantar los pagos de las pensiones debido a la pandemia de coronavirus, que se ha demostrado que es más peligrosa para las personas mayores y quienes tienen problemas de salud preexistentes.

El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo el miércoles que su gobierno comenzará a emitir el equivalente al doble de los pagos bimensuales de unos 112 dólares a partir de esta semana.

Agregó que la medida beneficiará a más de ocho millones de personas mayores.

Hasta el martes en América Latina se habían registrado casi 1.000 casos de COVID-19 y al menos 13 fallecidos.

En todo el mundo, 185.000 personas se han infectado y más de 7.300 han fallecido, pero la mitad de los que alguna vez tuvieron el virus se han recuperado. La mayoría de los enfermos presenta síntomas leves como fiebre o tos, pero para las personas mayores o que tienen otros problemas de salud pueden ser peores, incluso neumonía.