Foto cortesia de la Familia

Rafael Reyna

LOS ANGELES (CNS)- Un hombre de 47 años seguía hospitalizado y conectado a una máquina de vida artificial, días después de que fue golpeado y gravemente herido durante un ataque en el estacionamiento del Estadio de los Dodgers.

Rafael Reyna fue hospitalizado en el Centro Médico del Condado/USC después de que su esposa, Christel, dijo que fue golpeado y sufrió la fráctura de su cráneo mientras la multitud salía del estadio tras un partido de 13 innings que terminó con la derrota de 5-4 de los Dodgers de Los Ángeles ante los Arizona Diamondbacks el sábado 30 de Marzo.

Ella le dijo a NBC4 que estaba en FaceTime con Rafael Reyna cuando escuchó una mujer gritar “¿por qué hiciste eso?” cuando un hombre se acercó a su marido y lo maldijo. Luego oyó un crujido y la pantalla se volvió negra.

Dijo que su marido tiene hinchazón y sangrado en el cerebro.

Más tarde, en una entrevista con ABC7, Christel Reyna hizo una súplica llorando para cualquiera que haya lo que pasó lo comunique a la policía.

“Alguien tiene que dar un paso al frente”, dijo. “Sé que la gente lo vio. Los oí”. 

Ella y un hijo adulto han estado con su marido en el hospital, per Reyna dijo que no le había contado a sus hijos menores de 11 a 15 años lo que ocurrió.

Se ha creado una cuenta en GoFundMe para Reyna en www.gofundme.com/dodger-stadium-attack-victim-on-life-support. 

Inicialmente, la Policía de Los Ángeles investigó el incidente como un altercado, pero ahora lo han etiquetado como asalto.

El sospechoso, que escapó, es descrito como un hombre de 20 años que podría haber huido en un SUV color blanco, posiblemente un Toyota 4Runner, dijo la policía.

El equipo de seguridad de los Dodgers está trabajando con la policía y la organización publicó la siguiente declaración el sábado:

“Anoche, un altercado ocurrió de repente entre dos hombres que abandonaban el estadio”, leía la declaración.

“Uno de los hombres resultó herido como resultado del altercado. Un testigo informó inmediatamente del incidente a personal del estadio, y los técnicos médicos de emergencia fueron despachados rápidamente para proporcionar asistencia médica en la escena. El asunto ahora está siendo investigado por el Departamento de Policía de Los Ángeles, y los Dodgers están cooperando plenamente con la investigación”. 

En 2011, un ataque afuera del estadio de los Dodgers dejó a Bryan Stow de Santa Cruz con severos daños en el cerebro.

“No puedo creer que hayan pasado ocho años desde que me pasó a mí y está sucediendo de nuevo”, dijo Stow a la estación de televisión KTVU del área de la Bahía. “Me siento totalmente triste por él y su familia y enojado por la gente que hizo esto contra él”. 

Los dos hombres que atacaron a Stow se declararon culpables en 2014 y uno, Lonnie Sánchez, fue condenado a ocho años de prisión mientras que el otro, Marvin Norwood, recibió una condena de cuatro años. El incidente provocó un aumento medidas de seguridad en el estadio.

Se le pide a cualquiera con información sobre el ataque del sábado que llame al LAPD inmediatamente.