Las catástrofes y los desastres nos unen y a menudo sacan lo mejor de la gente. Y eso fue evidente esta semana al ver a la gente llegar a las oficinas de Operation para ayudar a preparar los paquetes que serán enviados y distribuidos entre las personas afectadas por la horrenda destrucción que dejó el huracán Harvey en Texas.
De Chatsworth a Houston hay más de 1,500 millas de distancia, pero los corazones, las oraciones y las buenas vibras de los voluntarios y el personal de la organización conocida por enviar paquetes a las tropas fuera del país están definitivamente cerca de aquellos que han perdido casas, coches, y casi toda posesión en el desastre natural.
“El mensaje es que Operation Gratitude está lista para ayudar a todos nuestros compatriotas estadounidenses”, dijo Carolyn Blashek, Fundadora y CEO de la agencia sin fines de lucro basada en Chatsworth mientras se unía a voluntarios que agarraban caramelos y chicles, talco, toallitas y otros artículos, preparando paquetes que se enviarán a Texas.
Paquetes más pequeños en bolsas rojas adornadas con el logotipo de Operation Gratitude también serán enviados a los oficiales de policía, miembros de la Guardia Nacional y socorristas a cargo de las operaciones de búsqueda y rescate.
“Siempre estamos aquí para agradecer a nuestros socorristas y a los que se ponen en peligro para nuestra protección”, agregó Blashek.
Pedido de ayuda
Justo antes del mediodía del lunes, Angel Cuevas, Vicepresidente de Operaciones para Operation Gratitude, envió una correo electrónico masivo a empresas que los apoyan, voluntarios y todos aquellos en su lista de contactos.
La respuesta fue inmediata y, en sus palabras, “tremenda”.
Desde entonces ha estado haciendo llamadas, recibiendo correos electrónicos y simplemente viendo “la infinita generosidad del público estadounidense queriendo ayudar”, dijo.
“La gente dice ‘he estado buscando una manera de ayudar’, ‘no hay nada más que pueda hacer’. Es una respuesta tremenda de la gente que quiere ayudar”, señaló cuevas.
Uno de los que respondió a esta llamada fue Olivia Martin de Northridge.
“Quiero ayudar a hacer la diferencia y dar mi tiempo en lo que necesiten”, dijo la mujer, ya jubilada.
“Es muy importante enviar estos paquetes. Sólo para mostrarles que le importan a alguien”, observó Martin. “Hace la diferencia. Demuestra que estás haciendo algo por la humanidad”.
Nancy Commeville, que el martes por la mañana se presentó con un grupo de compañeros de trabajo de las oficinas de Kaiser Permanente en Burbank, hizo eco de eso.
“Todo el mundo necesita ayuda y debemos ayudar a los necesitados”, expresó.
Esta no es la primera vez que la organización basada en Chatsworth está ayudando a los afectados por un desastre natural.
Han enviado paquetes después de devastadores incendios en Colorado Springs, Colorado y Prescott, Arizona; después de los tornados en Oklahoma y casi todos los fenómenos naturales en los últimos años.
“Hacemos esto cada vez que hay un desastre natural”, dijo Cuevas.
Tratan de proporcionar artículos básicos que opinan pueden ser sumamente necesarios, pero que a menudo la gente no les pone atención.
Esta vez son los calentadores de manos y pies (“nos gusta pensar con antelación y con el invierno que viene, la gente los necesitará”, dice Cuevas), calcetines (la gente necesitará unos secos), toallas (para secarse), pañales y toallitas para bebé, ropa para niños, barras de proteína y jerky [cecina] (¿quién no quiere un poco?) – cosas que uno puede dar por concedido, pero que se vuelven vitales después de un catástrofe. Estos son los artículos que requieren este momento y que piden que la gente done.
Kimberly Potter, subDirectora de Operaciones en Operation Gratitude, dijo que también añadirán a esos jabones, kits dentales y cualquier otra cosa que ya tengan en su almacén y que puedan ser de ayuda.
Ellos van a recoger estas cosas y empaquetarlas y “Esperemos que el viernes podamos coordinar con una compañía de transporte que puede donar su camión para llevarla a Houston”, dijo Cuevas.
La idea es tomar entre 6 y 8 paletas (unos 5,000 libras de productos) desde el almacén de Operation Gratitude en Chatsworth hasta el almacén de la compañía de camiones en Houston. A partir de ahí irá a donde se necesite. Aun trabajan en el que será el destino final. Por ahora, la tormenta tropical Harvey sigue golpeando el este de Texas con lluvia y las cosas son muy inciertas.
“El destino final, no lo sabemos todavía”, admitió Cuevas. “Es un poco difícil llegar a la gente con todo lo que está sucediendo”.
La semana que viene también enviarán paquetes de cariño a socorristas y equipos de búsqueda y salvamento que han estado trabajando para salvar vidas y ayudar a los necesitados.
Es una manera de agradecer y reconocer a aquellos que dan un paso al frente por otros, algo que Operation Gratitude ha estado haciendo desde su creación en 2003.
Desde entonces, han enviado más de 1.6 millones paquetes de cariño y esperan alcanzar el hito de 2 millones este Diciembre.
Cada año envían más de 200,000 paquetes llenos de alimentos, entretenimiento, artículos de higiene y hechos a mano, además de cartas personales de agradecimiento a los veteranos, socorristas, nuevos reclutas, héroes heridos, sus cuidadores, y a soldados de Estados Unidos desplegados en el extranjero.
Cada paquete contiene un producto donado valorado desde $45-100, y cuesta la organización $15 para montar y enviar.
Si usted quiere ayudar en este esfuerzo, puede ir a donar artículos o servir de voluntario para ordenar y empacar paquetes, puedes hacerlo este jueves 31 de Agosto y viernes 1 de Septiembre de 9 a.m. – 4 p.m. en Operation Gratitude, 21100 Lassen Street, Chatsworth. También puede donar dinero a la organización en www.operationgratitude.com