M. Terry / El Sol

Taft celebra ganar campeonatos consecutivos de voleibol femenino por primera vez en la historia de la escuela.

 

Los gritos, llantos y sonrisas explotaron este pasado fin de semana cuando Taft y Verdugo Hills derrotaron a sus contrincantes para ganar los títulos del voleibol femenino en la División II y III de la ciudad, respectivamente.

 Taft vs. Sylmar    

 Había mucho respeto entre estos oponentes. Prueba de ellos fue que cuando una jugadora de Sylmar se dislocó una rodilla durante un partido fuera de liga entre estos equipos, las jugadoras de ambas escuadras se congregaron alrededor de la jovencita para darle apoyo y ánimos.

Además, cuando a Sylmar le dieron una infracción por una violación de uniforme (al tener los números demasiado abajo) y las Spartans tuvieron que empezar el partido uno con un punto de desventaja, Taft no retornó el saque para estar ambos equipos parejos.

Pero aún así debía haber un ganador en este día y el equipo que jugó mejor fue Taft, que se adjudicó la victoria en tres de los 5 sets con marcadores idénticos de 25-21. Y aunque cada set tuvo su propio esfuerzo, y fueron sumamente competitivos, los resultados no sorprendieron a nadie.

En el set 1, los Toreadors (31-9-1) se pusieron en ventaja de 9-2 rápidamente, y luego pasaron el resto del tiempo impidiendo los avances de los Spartans. En el set 2, fue Sylmar (25-9-2) que se puso en ventaja de 10-4, aunque Taft los empató eventualmente a los 20 para luego ganar cinco de los últimos 6 puntos. Y en el set 3, el entrenador de Taft Arman Mercado se aseguró que cada jugadora de los Toreadors estuviera en el campo y jugara un punto o dos. Sin embargo, cuando Taft tomó una delantera de 12-11, Sylmar nunca logró sobrepasarlos.

Parte del dominio de Taft fue que sus dos principales “hitters” Andrea Bosnic (17 kills) y Lara Janjic (8 kills), ambas estudiantes de último año, lograron neutralizar el increíble esfuerzo de Kashauna Williams (19 kills) de Sylmar. Otra razón importante fue la experiencia. Taft la tenía y Sylmar no.

Esta era la cuarta final consecutiva para este grupo de Toreadors. Y, junto con el campeonato del último año, se convirtieron en el primer equipo femenino de Taft en ganar títulos consecutivos en la historia de la escuela (el cuarto campeonato en total).

“Hay una cosa especial con esta clase: todas han crecido aquí, no hay transferencias”, dijo Mercado. “Han estado conmigo por cuatro años, y todavía me sorprenden en las prácticas y en los partidos…sólo Andrea y Lara habían jugado antes en un equipo. Recordaré a este grupo tanto como todos los que he entrenado”.

Bosnic–quien sobrellevó una fuerte lesión esta temporada que le impidió jugar en su club y limitó su tiempo de práctica–también habló de la cercanía del equipo.

“Fue una temporada dura al principio, con nuevas jugadoras que trataban de conjugarse”, dijo ella. “Pero el punto de énfasis siempre fue que teníamos que trabajar para jugar como lo hacíamos el año pasado y poder llegar a la final otra vez. Y las estudiantes de último año y las que regresaron consideran esto un programa especial en Taft. Sabíamos la desilusión que habría si no ganábamos, y cuán especial sería si lo lográbamos”.

Por otra parte, este grupo de jugadoras en Sylmar nunca había jugado en una final, y el entrenador de las Spartans Soheil Mashhous se dio cuenta que los momentos de ansiedad pudieron haber impactado en puntos críticos del partido, cuando Sylmar respondía un saque demasiado lejos o dudaban en algún saque.

“Estábamos muy nerviosas”, dijo la entrenadora. “Sabíamos que ellas jugaban mejor, pero cualquiera de nosotros pudo haber ganado, especialmente los sets 2 y 3. Hubo algunos nervios al principio. Después de eso nos calmamos y creo que jugamos bien”.

Una buena parte del equipo de las Spartans, lideradas por Williams, regresa la próxima temporada. Quizá en un par de años Mashhoud hablará de este grupo con la misma admiración que Mercado tiene para esta escuadra de 2014.

Verdugo Hills vs. Franklin

Verdugo Hills se dijo a sí mismo que debía respetar a Franklin. Sin embargo, las Panthers (8-6) no fueron a ningún torneo y solo jugaron encuentros de la Liga Eastern. Pero cuando un equipo que ocupa la casilla 9 puede ganarle al No. 1, como lo hizo Franklin en los cuartos de final al derrotar a King Drew de Los Angeles (y al eliminar a Panorama y Arleta), la aparición del equipo puede ser vista como un anomalía.

“Pensé que eran muy parecidos a nosotros–no altos, sino que eficientes y trabajadores”, dijo Will Reinhart, entrenador de Verdugo Hills.

Aún así las Dons (21-8-2), que ocupan la tercera casilla, no tenían que hacer nada sorprendente en la postemporada. Habían perdido un set mientras despachaban a Roybal, Manual Arts y Westchester de Los Angeles. 

Y al estar tan cerca de un campeonato, el primero desde que ganaron el City Invitational en 2007, las Dons no iban a permitir que la arrogancia arruinara su momento mágico.

Al contrario, Verdugo Hills tomó el último paso para ganar el título de la División II ganando en cuatro sets. El primer set fue una victoria de 24-10. Franklin probó ser un fuerte competidor y ganó el segundo set 25-20, antes que Verdugo Hills consiguiera ganar los últimos dos sets, ambos por marcador de 25-21.

“Fue muy duro derrotarlas, pero eso era lo que esperábamos”, dijo Reinhart. “Ellas jugaron una gran defensiva, y nunca se dieron por vencidas. Pero nuestras chicas también fueron persistentes. Y no puedo decir lo suficiente de nuestra capitana Ariana Espindola (12 kills). Ella ha sido nuestro corazón y alma. Y nuestras suplentes (Kaylee Rydell y Joriz Cuyugan) también fueron vitales para nosotros. Les dijimos todo el año que aunque son jugadoras de reserva, tienes que estar listas en cualquier momento que se les llame. Y lo hicieron”.

La victoria también puso fin a una racha dudosa para el entrenador de los Dons Will Reinhart, cuyos equipos (tres de chicas y dos de varones habían perdido en sus últimas cinco apariciones en la final).

“Ahora estoy del lado correcto de las cosas”, dijo él.