SAN SALVADOR, El Salvador (AP) _ Las autoridades de Centros Penales continuaron el martes con el traslado de pandilleros a otras cárceles y según informaron ahora estarán presos en lugares determinados por su nivel de peligrosidad y no por su pertenencia a un grupo criminal.

Con esta decisión, los pandilleros de la Mara Salvatrucha (MS-13) y del Barrio 18, estarán mezclados en las cárceles, dejando atrás el privilegio de tener penales exclusivos para una determinada mara o pandilla.

“Ahora se está movilizando una cantidad de personas privadas de libertad de un centro penal a otro centro penal, para evitar que desde los centros penales dirijan las operaciones criminales”, dijo en un evento público el presidente Salvador Sánchez Cerén.

La Dirección General de Centros Penales confirmó el traslado de 2,427 pandilleros a tres cárceles en diferentes puntos del país.

“Esto se convierte en una acción permanente para darle cumplimiento a nuestra política penitenciaria, que establece tener centros penales modernos, seguros y rehabilitantes”, según un informe de la Dirección .

Los traslados también tienen como objetivo desbaratar las estructuras que tienen las maras en las cárceles y sus alrededores donde la pandilla rival tiene presencia.

Recientemente las autoridades enviaron a una cárcel de máxima seguridad a 31 pandilleros considerados de alta peligrosidad, entre ellos cabecillas del Barrio 18 y de la MS13 que fueron incluidos en una lista de criminales trasnacionales que elabora el departamento del Tesoro de los Estados Unidos.

Las autoridades de Centros Penales dijeron que los traslados a otras cárceles, “es parte del proceso de clasificación de privados de libertad que tiene como objetivo ubicar a los reos de mayor peligrosidad en centros penales con un mayor régimen de seguridad”.

Estas acciones llegan la misma semana en que el gobierno salvadoreño anunció el lunes que dispondrá de un batallón de policías especializado en el combate de las maras, o pandillas, que trabajará en forma coordinada con otros tres batallones de reacción inmediata de la Fuerza Armada. En tanto, un soldado murió y otros tres resultaron heridos en ataques perpetrados por presuntos pandilleros. 

El comisionado de la Presidencia para la Seguridad, Hato Hasbún, dijo a los periodistas que la Policía Nacional Civil dispondrá de 200 hombres para conformar un “batallón especial de limpieza”, pero se negó a dar detalles de los planes de trabajo de este nuevo grupo de la policía que tendrá como objetivo el combate de estas estructuras criminales que en las últimas semanas han arreciado sus ataques armados contra las autoridades. 

Hasbún, que se negó a dar detalles del nuevo batallón especializado, explicó que operará en los 50 municipios más violentos del país. 

“Yo no voy a explicar cómo funcionan porque, si no, estaría revelando datos que yo no puedo revelar; son batallones inmediatos, especializados”, agregó. 

Entretanto, presuntos pandilleros atacaron la mañana del lunes a tres soldados después que salieron de licencia de una guarnición militar en la capital y esperaban el autobús para dirigirse a sus hogares. Uno de los soldados resultó muerto y los otros dos fueron heridos. 

Más tarde, también en la capital, presuntos pandilleros que se transportaban en un automóvil dispararon contra las oficinas del Instituto de Pensionados de la Fuerza Armada, lo que provocó heridas a un efectivo. 

La noche del domingo, en dos hechos distintos, presuntos pandilleros asesinaron a dos soldados cuando se encontraban en sus casas de licencia. 

El sábado, unos 20 pandilleros armados con fusiles, escopetas y pistolas sostuvieron un enfrentamiento armado con una patrulla de la Fuerza Armada con el saldo de nueve pandilleros muertos y dos capturados ilesos, todos de la pandilla Barrio 18. Se requisaron dos fusiles M16 y una pistola 9 milímetros, con abundante munición. 

En El Salvador, considerado uno de los países más violentos del mundo, los pandilleros tienen presencia en gran parte del territorio nacional y están involucrados en la mayoría de los crímenes que se cometen en el país. 

Marzo de 2015 cerró con 481 homicidios, equivalente a 16 muertes violentas por día, lo que lo convierte en uno de los meses más violentos en los últimos cinco años. 

Según estadísticas oficiales, 2014 cerró con 3,942 asesinatos, un aumento de 1,429 muertes violentas en comparación con el año anterior.