PANAMA

Honran a fotógrafo español muerto durante invasión a Panamá

A pocas semanas de cumplirse el trigésimo aniversario de la invasión de Estados Unidos que expulsó al dictador panameño Manuel Antonio Noriega, una exposición busca rendir homenaje por primera vez a un fotógrafo español muerto en esa acción militar.

Se trata de una pequeña muestra del trabajo realizado por Juantxu Rodríguez años antes de la invasión y de algunas de las impactantes imágenes que tomó en las primeras horas de la operación estadounidense, entre ellas la de nueve cadáveres tendidos en la morgue de un hospital capitalino.

Rodríguez no era propiamente un fotógrafo de guerra y la invasión del 20 de diciembre de 1989 lo encontró por accidente en Panamá. Oriundo de Casillas de Coria, el español pasaba por la nación centroamericana en el marco de un trabajo que realizaba para diario El País sobre los padres jesuitas en América Latina tras la muerte un mes antes de un grupo de jesuitas españoles en El Salvador.

Rodríguez logró salir del aeropuerto de Panamá con ayuda de los diplomáticos de su país y en cuestión de horas consiguió fotografiar los intentos de saqueos en almacenes en el centro de la capital y acceder sorprendentemente al hospital Santo Tomás, adonde llevaban a los heridos y muertos durante el ataque estadounidense.

Pero en la mañana del 21 de diciembre cayó muerto tras recibir disparos de un soldado norteamericano frente a un hotel donde se encontraba la prensa extranjera. Tenía 32 años.

“Para nosotros la importancia de presentar la obra de Juantxu es que los panameños conozcan el recorrido y la trayectoria profesional de una de las víctimas de la invasión”, destacó a The Associated Press la cuñada y portavoz de la familia del fotógrafo, Elisa Pavón. Además, “porque llevamos 30 años, al igual que los familiares de las otras víctimas, pidiendo verdad, justicia y reparación”.

 

MEXICO

Ciudad de México sanciona distribución de imágenes íntimas

l gobierno de la Ciudad de México aprobó una ley que sanciona con varios años en prisión a quien grabe o distribuya imágenes sexuales explícitas sin el consentimiento de esa persona o a través de engaños.

Los legisladores de la ciudad aprobaron el martes por unanimidad la nueva medida, conocida como “Ley Olimpia”. En ella se tipifica la ofensa como un delito y se sanciona con entre cuatro y seis años en prisión. Las sanciones pueden aumentar de dos a tres años cuando el perpetrador es familiar o tuvo una relación romántica con la víctima.

El Congreso de la ciudad dice que con ello busca garantizar los derechos a la intimidad personal e intimidad sexual, y protege la integridad de las mujeres.

La ley se llamó así por la activista Olimpia Coral, quien tuiteó que la aprobación de la ley le hizo pensar: “ese momento en el que no sabes si estás soñando”.

 

ESPANA

Domingo adjudica acusaciones a diferencias culturales

Plácido Domingo está tratando de adjudicar las acusaciones de acoso sexual en su contra a las diferencias culturales, y dice que hoy en día “en algunos sitios no se puede ya decir nada a una mujer”.

En una entrevista publicada el miércoles en el principal diario de España, El País, el tenor madrileño dijo que “aquí (en España) no es así, pero en otras partes y, concretamente, en estos grupos de donde salen las acusaciones, es así”.

The Associated Press reportó en meses recientes alegatos de más de 20 mujeres en Estados Unidos que dicen que Domingo las acosó sexualmente o se comportó de manera inapropiada con ellas. Algunas aseguran que rechazarlo perjudicó sus carreras musicales.

Domingo, de 78 años, niega los señalamientos.

Mientras la mayoría de sus actuaciones en Estados Unidos han sido canceladas ante los reportes y una investigación está en curso en la Ópera de Los Ángeles, los teatros europeos lo han apoyado y el público lo ha seguido ovacionando.

Algunos gerentes de óperas, notablemente en el Festival de Salzburgo y la Ópera Estatal de Viena, respondieron diciendo que el cantante siempre se ha portado bien en sus establecimientos.

Domingo dijo a El País que cree que el acoso “debe ser castigado en cada momento y en todas las épocas”, pero que siente que las reglas y los estándares han cambiado.

 

BRASIL

Guerra de Bolsonaro con las ONG alcanza a ciudad amazónica

Una tranquila población se ha convertido en el escenario de la creciente hostilidad entre el presidente ultraderechista de Brasil, Jair Bolsonaro, y grupos ambientalistas, tras la detención de varios bomberos voluntarios a los que el mandatario acusa de provocar incendios en la selva.

El episodio hizo que los líderes de nueve organizaciones no gubernamentales denunciaran el martes la persecución de activistas, académicos y científicos desde que Bolsonaro ganó las elecciones el año pasado. El presidente ha acusado a muchos de ellos de trabajar en la Amazonía a instancias de extranjeros como el actor Leonardo DiCaprio. Los grupos han criticado la campaña de Bolsonaro para desarrollar el bosque tropical más grande del mundo.

“El gobierno considera al tercer sector, la sociedad civil brasileña, como enemigo del país”, dijo Ricardo Borges, director ejecutivo de Pact for Democracy, en una videoconferencia con periodistas en la que también participaron las delegaciones brasileñas del Fondo Mundial de la Naturaleza y Amnistía Internacional.

 

La policía acusó el mes pasado a varios bomberos voluntarios de provocar incendios para conseguir financiamiento a través de las ONG locales en Alter do Chao, una ciudad de menos de 10.000 personas a la orilla del río Tapajos, en el estado de Para. La fiscalía federal no tardó en decir que su investigación no había hallado pruebas al respecto, el oficial de policía local que dirigía las pesquisas fue apartado del caso y un juez ordenó la liberación de los bomberos.

Aun así, Bolsonaro, excapitán del Ejército, respaldó públicamente las acusaciones de la policía contra los bomberos y las ONG. Para algunos, las imágenes emitidas en televisión de policías haciendo las detenciones y registrando las sedes de las ONG sirvieron como confirmación de los cargos. Bolsonaro incluso acusó a DiCaprio de financiar a las ONG, algo que el actor negó.