El verano ya pasó, pero la temporada de mosquitos en la Ciudad de San Fernando y otras partes del Valle y del condado de Los Ángeles no termina.

Representantes del Greater Los Angeles County Vector Control District (GLACVCD) se reunieron recientemente con residentes en la escuela primaria O’Melveny para discutir la actividad “esporádica” de estos insectos que pueden transmitir una variedad de enfermedades a los humanos a través de las picaduras.

Según Levy Sun, vocero de GLACVCD, los mosquitos aedes – que fueron prevalentes en Pacoima durante los meses de verano – han aparecido en la Ciudad de San Fernando y otras partes del Valle.

“Hemos encontrado mosquitos aquí”, en la escuela, dijo Sun. También han sido detectados en vecindarios aledaños.

“No es un problema de la escuela, es un problema de ciudad”, recalcó Sun.

Los mosquitos aedes, dijo Sun, migran, crecen y se propagan donde haya agua estancada. Tienen cuerpos de color negro con manchas o líneas blancas. Tienden a picar o “alimentarse” primordialmente durante las horas de sol, particularmente dos horas después del amanecer o una horas antes del anochecer. Y su tiempo de vida se ha extendido por el inusual clima cálido de Octubre y Noviembre.

Actualmente los mosquitos aedes son más que todo una molestia. Pero Sun indica que las picadas de las hembras pueden producir el virus Zika, la fiebre amarilla, y el dengue. Ninguno de estos males es potencialmente fatal, pero pueden causar muchos dolores y otras complicaciones graves.

Los síntomas de la fiebre amarilla pueden incluir fiebre, escalofríos, pérdida de apetito, náusea, dolor muscular – particularmente en la espalda – y dolores de cabeza. En cerca de 15% de los infectos también puede haber dolor abdominal y daño al hígado, que puede hacer que la piel se torne amarillenta.

Los síntomas del dengue típicamente empiezan tres a 14 días después de una infección e incluyen fiebre alta, dolor de cabeza, vómitos, dolor muscular y de las coyunturas, y salpullido en la piel. La recuperación generalmente dura siete días.

El virus Zika puede tener síntomas leves, similares a los del dengue. Pero también puede producir desórdenes neurológicos en los adultos. Si una embarazada lo contrae, puede causar severas malformaciones cerebrales en el feto.

Desafortunadamente no hay una vacuna contra el virus del Zika, dijo Sun. “Hay vacunas para los otros, pero desconoce cuánta haya en caso de una epidemia”.

Sun recomendó que las personas susceptibles a las picadas de mosquito deben continuar protegiéndose con repelente de insectos y usar ropa que cubra la mayor parte de cuerpo. Los dueños de casas y negocios también deberían deshacerse de agua estancada en sus propiedades. La hembra del mosquito aedes puede depositar sus huevos en algo tan pequeño como una tapadera de botella.

Añadió que no hay planes actuales para que vengan a fumigar a San Fernando.

“Lo haríamos si hubiera una epidemia de Zika u otras fiebres”, expresó. “Pero fumigar es una solución a corto plazo. No elimina los huevos, o el agua estancada”.

También recomendó poner repelente de insectos en los niños antes de ir a la escuela “porque los chicos tienden a removerlo o se elimina con el sudor”. En cambio, deberían cargar el repelente con ellos y aplicarlo frecuentemente.